Capital de la provincia de Flandes Occidental, Brujas se localiza a unos 90 kilómetros de Bruselas (a una hora en tren) y ofrece numerosos atractivos: es una ciudad especialmente romántica por su arquitectura y sus canales, además de por su impresionante casco histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad.
Suele ser la excursión más habitual que se hace desde Bruselas, seguida por Gante y Amberes; de hecho, muchos viajeros acuden a Bélgica con la idea de visitar Brujas casi con más interés que la propia capital, atraídos por su buena reputación, ya que se trata de una de las ciudades medievales mejor conservadas de Europa.
Cómo llegar a Brujas
- En tren: desde cualquiera de las estaciones de tren de Bruselas (Bruxelles-Midi; Bruxelles-Nord y Bruxelles-Central), podemos coger un tren dirección Ostende, que en apenas una hora nos llevará hasta Brujas. El precio del billete i/v para un adulto es de 28,20 €.

Autobús en Brujas.
Qué ver en Brujas
- Al llegar en tren lo primero que encontraréis en Brujas será el Parque Minnewater, cuyo lago con cisnes ha debido de ser testigo de numerosas declaraciones de amor; a continuación veréis el begijnhof, una de esas joyas que guarda Brujas y que no debéis perderos, pues existen pocos lugares tan «espitiruales» como este.

Begijnhof de Brujas.
- La plaza Grote Markt es el centro neurálgico de Brujas, donde se organiza un mercado los sábados y donde podréis subir al famoso Belfort, el campanario de Brujas.
- Junto a ella se localiza la otra gran plaza de Brujas, Burg, donde podréis visitar algunos edificios interesantes como la Basílica de la Santa Sangre, el Stadhuis -ayuntamiento- o el Brugse Vrije.

Plaza Burg de Brujas.
- Si, como a nosotros, os gusta el arte, no os perdáis el Museo Memling y el Museo Groeninge: el primero es un antiguo hospital medieval donde podréis contemplar varias obras de Memling; el segundo, uno de los máximos referentes en pintura flamenca.

trada al Museo Groeninge.
- Si lo que buscáis son rincones con encanto donde sacar las mejores fotografías, podéis acercaros hasta la Plaza Jan Van Eyck, la Iglesia de Nuestra Señora o el muelle del Rosario (Rozenhoedkaai).

Sala de retratos de los administradores del antiguo hospital (actual Museo Memling).

Barcos turísticos por los canales de Brujas.
Brujas es uno de esos sitios en los que, a pesar de la cantidad de turistas que sueles encontrar, puedes sentirte fácilmente transportado varios siglos atrás, cuando la ciudad era un centro portuario lleno de actividad que actuaba como motor económico y comercial de toda la región de Flandes.
Si viajáis a Bruselas reservad al menos un día para pasarlo en ella porque no os arrepentiréis de conocer la que es sin duda una de las ciudades más bellas del mundo.
Dónde comer en Brujas
De Stove
- Dirección: Kleine Sint-Amandsstraat, 4
- Precio: alto
Esta auténtica joya de la gastronomía belga cuenta tan solo con unas pocas mesas en su salón, lo que ya nos da la pista de por dónde van los tiros: alta cocina en forma de platos caseros, elaborados con productos de temporada y sin pretensiones. En De Stove es casero hasta el pan, y aunque puede salir a unos 60 € por persona, si disfrutáis de la buena mesa os aseguramos que no os arrepentiréis de esta experiencia. Imprescindible reservar.

Restaurante De Stove, en Brujas.
pro Deo
- Dirección: Langestraat, 16
- Precio: medio
Algo alejado del centro, se trata de un pequeño restaurante familiar donde toda la comida es casera y realmente buena. Merece la pena hacerle una visita, pero la cocina cierra temprano (14:00/21:30 horas), así que os recomendamos ir con bastante tiempo. Tienen un menú del día abundante y sabroso por unos 13 €, un precio más que razonable para la media de Brujas, y también cuentan con platos para vegetarianos.
Books & Brunch
- Dirección: Garenmarkt, 30
- Precio: económico
Como su propio nombre indica, esta cafetería cercana al Museo Groeninge es el lugar perfecto para hacer un brunch (desayuno-almuerzo) en Brujas. Desayunos abundantes basados en productos orgánicos y naturales muy bien preparados. ¿Lo mejor? Que está llena de libros, para coger prestados o para comprarlos. Pintoresco y acogedor, el Books & Brunch es el lugar perfecto para refugiarse durante un buen rato en tardes lluviosas.

La chocolatería Dumon en Brujas es un buen lugar para comprar bombones o probar sus variedades de chocolate.
Gran Kaffee de Passage
- Dirección: Dweerstraat, 26
- Precio: medio
Se trata de un restaurante de ambiente cálido, decorado a la antigua y con platos clásicos y caseros de la cocina belga, muy abundantes y riquísimos. Os aconsejamos probar la lasaña y las costillas de cerdo, que a nosotros nos gustaron especialmente. Unos 20 € por persona.
Arthie’s
- Dirección: Wollestraat, 1
- Precio: medio
Un local con una decoración curiosa y un poco alocada (aún no hemos olvidado a los pingüinos de colores). Pero lo más importante es que la comida está buena: hay que probar los mejillones con patatas fritas y las costillas, y lo mejor es que no cierran a mediodía. Cerca de la Plaza Markt, pero sin estar atestado de turistas y con precios económicos.
Chang Thong Thai
- Dirección: Kleine Hoefijzerstraat, 1
- Precio: medio
Los sabemos. Cuando viaja a Brujas la primera opción para comer no es un restaurante tailandés. Pero en este caso os garantizamos que, si os gusta este tipo de comida, merece la pena probarlo. El local es un poco complicado de encontrar, pero los platos son sabrosísimos, abundantes y a precios razonables, y los dueños son muy amables.
Reliva
- Dirección: Goezeputstraat, 6
- Precio: alto
Lo mejor del Reliva es que parte de la carta es apta para celíacos (y muchos platos también lo son para intolerantes a la lactosa), por lo que si tenéis alguna de estas necesidades a la hora de comer, es una opción a tener en cuenta. Los precios son algo más elevados que la media pero la comida es de gran calidad. Lo lleva una familia de chefs que preparan platos muy bien pensados y con un toque francés. El servicio es realmente amable y tienen una buena carta de vinos. Solo abre para las cenas (18:00-22:00 horas).